Miguel Condé

Pittsburg (Estados Unidos), 1939

Miguel Condé

Miguel Condé Weiner nació en Pittsburg (Pennsylvania, Estados Unidos) en 1939. Es un pintor, dibujante y grabador figurativo mexicano. Vive y trabaja entre Madrid y Sitges.

Autodidacta a excepción de estudios de anatomía con Stephen Rogers Peck en Nueva York y técnicas de grabado en el Atelier 17 de Stanley William Hayter en París. También asistió a cursos impartidos por el profesor de Historia del Arte y comisario Millard Meiss, en el Fogg Art Museum de la Universidad de Harvard.

Becario de la Fundación Guggenheim para América Latina y del Gobierno Francés, Condé ha recibido varios premios internacionales y es miembro titular de la Société des Peintres-Graveurs Français.

Su obra está representada en numerosos museos y colecciones, como el Museo de Arte Moderno de Nueva York, el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía (Madrid), la Albertina en Viena o la Bibliothèque Nationale de France (París), entre otros.

Condé ha construido una exquisita obra centrada en la figura humana absolutamente personal y de una gran originalidad que es un regalo para los sentidos. Utiliza todas las técnicas del oficio, al modo de los grandes maestros, a los que a su modo parece reinterpretar aunque finalmente lo único que de ellos queda es la potencia y sugestión de las imágenes.

Su mundo se pasea por la ironía, atraviesa el absurdo y se asienta en un muy personal surrealismo situado en un mundo ucrónico, en el que parece que las realidades se hayan suspendido o que se solapen con indiferencia. “Se solaza especialmente recuperando para la modernidad temáticas propias de Cervantes o de Quevedo, escenas y personajes que evocan la estética de la tardo edad media aunque se sitúen al margen del tiempo y de la historia”, escribía la crítica María Lluisa Borrás, para quien “en sus composiciones, cada vez más complejas, más detallistas, se funde paulatinamente lo absurdo con lo enigmático, la ironía negra de Goya, las fantasmagorías de El Bosco, la repulsión y la fluidez de Brueghel, el virtuoso dibujo de Durero”.

A Condé, además, le fascina la materia —el papel y el buril— y busca los soportes más sorprendentes como viejos pergaminos o libros deshilachados, y los envuelve en objets trouvés como marcos antiguos y otras rarezas.

Aquí podéis consultar las obras del artista que forman parte de la colección.